Introducción al manejo forestal- Conservación de recursos naturales.



Introducción

El manejo forestal comprende las decisiones y actividades encaminadas al aprovechamiento de los recursos forestales de manera ordenada, procurando satisfacer las necesidades de la sociedad actual, sin comprometer la provisión de bienes y servicios para las generaciones futuras.

Los bosques naturales se manejaron en el pasado principalmente para la producción de madera y energía (leña y carbón). El aprovechamiento se realizó en algunos casos en forma excesiva, lo que ocasionó consecuentemente fuertes presiones hacia su protección, provocando la pérdida de importantes superficies de bosques, selvas y matorrales. Las prácticas de aprovechamiento se desarrollaron principalmente como respuesta a la demanda del mercado nacional e internacional, básicamente de maderas, ignorando en muchos casos otros aspectos muy importantes de los ecosistemas forestales como los ambientales y ecológicos, los bienes y servicios que brindan (principalmente la captura de carbono y los servicios hidrológicos), así como las implicaciones sociales, económicas, ambientales e institucionales de los ecosistemas forestales y su manejo.

El manejo forestal sustentable es un principio que asegura la producción de diversos bienes y servicios a partir de los ecosistemas forestales, de una manera perpetua y óptima, conservando siempre los valores de tales ecosistemas; como una estrategia de manejo de recursos naturales, en la cual las actividades forestales son consideradas en el contexto de las interacciones ecológicas, económicas y sociales, dentro de un área o región definida, a corto y largo plazo. El manejo forestal sustentable es entonces la gestión y utilización de los bosques y de los terrenos forestales de una manera y con una intensidad tales que conserven su diversidad biológica, su productividad, su capacidad de regeneración, su vitalidad y su capacidad de cumplir, en el presente y en el futuro, las funciones ecológicas, económicas y sociales pertinentes, a escala local, nacional y mundial, sin dañar otros ecosistemas.

 

 

 

Resumen

 

El manejo forestal sustentable en el siglo XXI es un principio que asegura la producción de diversos bienes y servicios a partir de los ecosistemas forestales de una manera perpetua y óptima, conservando siempre los valores de tales ecosistemas, como una estrategia de manejo de recursos naturales, en la cual las actividades forestales son consideradas en el contexto de las interacciones ecológicas, económicas y sociales, dentro de un área o región definida, a corto y largo plazo.

 El reto del manejo forestal sustentable es la gestión y utilización de los bosques y de los terrenos forestales de una manera y con una intensidad tales que conserven su diversidad biológica, su productividad, su capacidad de regeneración, su vitalidad y su capacidad de cumplir, en el presente y en el futuro, las funciones ecológicas, económicas y sociales pertinentes, a escala local, nacional y mundial, sin dañar otros ecosistemas.

En este trabajo se revisa la evolución del concepto de manejo forestal y las nuevas  aplicaciones, destacando sus características como proceso administrativo, sus relaciones con la provisión de servicios ambientales, el papel de la certificación para el desarrollo del buen manejo forestal. Se enfatiza asimismo la necesidad de formar recursos humanos, creando y mejorando capacidades para la planeación, ejecución y monitoreo del manejo forestal.

 

 

 

 

 

Resultados

Manejo forestal como proceso administrativo

Los bosques han estado sujetos a intensas presiones por actividades humanas. Lo cual es una realidad que vivimos en el día a día a pesar de que las acciones por parte de las entidades encargadas es fuerte, pero no solo eso sino que el rápido cambio demográfico, los acelerados avances tecnológicos y el crecimiento de la demanda de energía han ejercido nuevas presiones a la actividad forestal para abordar problemas globales emergentes, particularmente energía y cambio climático. El crecimiento de la demanda de productos forestales y servicios está determinada por múltiples factores, y el crecimiento poblacional es una de las causas más importantes. El efecto demográfico por sí solo causará cambios significativos en la demanda de bienes y servicios provenientes del bosque. Los tomadores de decisiones del sector forestal se enfrentarán en el presente siglo al gran reto de buscar responder a las necesidades crecientes de productos forestales mientras se mantienen las múltiples funciones de los ecosistemas forestales. El establecimiento de objetivos de manejo forestal es una tarea compleja que consiste en determinar los productos y servicios a ser obtenidos del bosque y especificar las medidas de logro de las metas asociadas. Tradicionalmente, los manejadores de bosques seleccionaban una combinación de producción de madera, generación de empleo y beneficios económicos como los principales componentes del programa de manejo forestal. En el presente siglo, establecer objetivos de manejo debe contemplar una visión multiobjetivo, teniendo en cuenta que muchos de ellos compiten entre sí y que no todas las metas pueden expresarse en unidades físicas, lo que dificulta su medición cuantitativa. Los objetivos de la actividad forestal no solo varían a diferentes escalas, cambian también a través del tiempo y difieren de un contexto socioeconómico a otro. Las metas de manejo requieren ser revisadas constantemente, considerando los valores sociales prevalecientes, el estado de la tecnología disponible y el nivel de desarrollo económico, así como las percepciones públicas de las condiciones ecológicas generales del bosque y el impacto potencial de los regímenes de manejo propuestos.

Manejo forestal y servicios de los ecosistemas

En las últimas dos décadas se han observado cambios en la valoración social de los recursos naturales y la forma en que estos se manejan, lo que ha ocasionado un cambio fundamental en el contexto en el cual se desarrollan las actividades del manejo forestal. Los bosques no son más que una fuente de madera; en su lugar se convierten en fuente de una variedad de productos y servicios, incluyendo la diversidad biológica, hábitats, así como oportunidades recreativas y educativas.

Los servicios que proveen los ecosistemas forestales son tanto o más importantes que los productos maderables. Por ello, los sistemas de manejo deben contemplar no solo los sistemas de cosecha sostenible, sino la provisión permanente de los servicios de los ecosistemas forestales, a la vez ofrece un amplio marco de oportunidades para la creatividad en cuanto a desarrollo de modelos de manejo y de estrategias de gestión de los recursos bajo su responsabilidad, internalizando el valor del bosque en la conservación de la biodiversidad, provisión de servicios hidrológicos y captura de carbono, básicamente.

Las oportunidades de desarrollo del manejo forestal sostenible se ubican también en las estrategias de gestión de recursos forestales que la comunidad internacional ha desarrollado en los últimos años, un grupo de países llevó el tema de la deforestación evitada a la agenda de la Conferencia de las Partes (COP) en la que se reconoció la reducción de emisiones por deforestación y degradación de los bosques (REDD) como un mecanismo válido en la lucha contra el cambio climático. Inicialmente, las discusiones se centraron en lograr el reconocimiento del potencial de la reducción de emisiones causadas por deforestación (RED); la segunda D se incluyó más tarde al reconocer que la degradación de los bosques representa también una fuente importante de emisiones de gases de efecto invernadero, definiéndose el término REDD. Se incorporó luego el papel de la conservación, el manejo sustentable de los bosques y el mejoramiento de los almacenes de carbono, elementos que constituyen el signo +. REDD+ denota entonces las actividades que reducen las emisiones por evitar la deforestación y degradación forestal y contribuyen a la conservación, manejo sostenible de los bosques y mejoramiento de los acervos de carbono forestal, y que tienen el potencial de generar significativos beneficios sociales y ambientales. A través de las acciones tempranas REDD+ se busca, a escala local, la promoción de la competitividad en las diferentes actividades productivas, incluyendo las actividades agropecuarias asociadas al bosque; el fortalecimiento del manejo comunitario de los bosques y de sus empresas forestales; la diversificación productiva, y la conservación y protección de los bosques, de sus servicios y su biodiversidad en el largo plazo. La implementación de proyectos de esta naturaleza es una alternativa factible a corto plazo.

Certificación del manejo forestal

El monitoreo es una fase determinante en el proceso administrativo denominado manejo forestal y cobrará cada vez mayor importancia en el futuro. El manejo forestal sostenible puede ser caracterizado y evaluado a través de principios, criterios e indicadores. Diversas instituciones han desarrollado con detalle estos aspectos como base para evaluar la sustentabilidad según el tipo de ecosistema forestal, escala de manejo y productos aprovechados. Lo anterior ha dado origen a la certificación forestal, que constituye un proceso que evalúa el desempeño del manejo forestal, para garantizar que los productos que provienen de los ecosistemas forestales tomen en cuenta estándares que sean: ambientalmente adecuados, económicamente viables y socialmente benéficos.

Los principios actuales del manejo forestal sustentable reconocidos internacionalmente son:

           Tiende hacia el uso sustentable de los recursos de los ecosistemas.

           Es holístico.

           Está basado en el ecosistema.

           Tiene una perspectiva de paisaje.

           Establece objetivos múltiples.

           Es integrador.

           Incluye la participación.

Por otra parte Los principios de manejo forestal sustentable del denominado Proceso de Montreal, son:

1.         Conservación de la diversidad biológica.

2.         Mantenimiento de la capacidad productiva de los ecosistemas forestales.

3.         Mantenimiento de la salud y vitalidad de los ecosistemas forestales.

4.         Conservación y mantenimiento de los recursos suelo y agua.

5.         Mantenimiento de la contribución de los bosques al ciclo global del carbono.

Para la certificación del manejo sustentable de bosque los principios son:

1.         La Empresa o predio Forestal está legalmente constituida.

2.         La  Empresa o predio Forestal cuenta con una administración y archivos de registros de entradas y salidas de materias primas forestales.

3.         La Empresa o predio Forestal muestra un compromiso a favor de la conservación del ecosistema forestal y mantiene una conducta apegada a la normatividad vigente.

4.         La Empresa o predio Forestal observa la normatividad y realiza acciones para prevenir y mitigar efectos adversos ocasionados por el aprovechamiento forestal.

5.         La Empresa o predio forestal lleva registros y aplica procedimientos que aseguran la verificación de volúmenes y de la legal procedencia de la materia prima forestal.

Prácticas a nivel paisaje:

           Conectividad de hábitats.

           Claros en el bosque.

           Red de áreas de conservación.

           Protección de hábitats en las partes altas de las cuencas.

           Protección de ecosistemas ribereños.

           Bosques sobremaduros.

Prácticas a nivel rodal:

           Estructura vertical y horizontal.

           Estructura y diversidad de especies.

           Formación de micro-hábitats.

           Actividades recreativas.

           Biomasa residual de la cosecha forestal.

Prácticas a nivel sitio:

           Protección de áreas de importancia crítica.

           Mantenimiento de árboles secos o con cavidades.

           Limpieza de las áreas de corta.

Los sistemas de certificación exitosos se han sido asociados a enfoques plurales y participativos para la toma de decisiones en los bosques y han ido más allá de simplemente mejorar las técnicas de cosecha, abordando aspectos sociales y ambientales. La certificación ha contribuido también a elevar el conocimiento y comprensión del manejo forestal sustentable. Los criterios e indicadores han propiciado un debate público sobre los bosques más estructurados y han resultado en una más amplia aceptación de la aplicación del manejo forestal como estrategia de conservación del bosque.

 

 


Toma de decisiones

La función del manejo forestal es administrar la capacidad productiva del bosque para generar diversos de bienes y servicios para satisfacer necesidades humanas. El final de la primacía de la madera hacia finales del siglo pasado marca el inicio de una nueva era en la que los planes de manejo deben ser hechos a nivel de paisaje con el propósito de mantener una diversidad de funciones de los ecosistemas. El cambio de la planeación forestal de nivel rodal a nivel paisaje amplía la visión de los objetivos de manejo forestal para abarcar el papel de los bosques en proveer ingresos y oportunidades de desarrollo, preservar la diversidad biológica y los hábitats, y posibilitar un apropiado funcionamiento del sistema global del carbono y del ciclo hidrológico. Los esquemas de toma de decisiones han cambiado en consecuencia integrando actualmente consideraciones económicas, ambientales, sociales y culturales, con lo que el proceso se ha tornado más complejo. Prácticamente en todo el mundo se ha discutido quién toma o debe tomar las decisiones acerca del bosque y cómo se toman o debieran tomarse tales decisiones.

Por otra parte, la formulación y selección de alternativas de manejo forestal se podrá realizar incorporando herramientas de toma de decisiones como la denominada Proceso Analítico Jerárquico, que posibilita la participación de los sectores sociales involucrados. El proceso analítico jerárquico es una técnica para la toma de decisiones con atributos múltiples. El método consiste en formalizar la comprensión intuitiva de problemas complejos mediante la construcción de un modelo jerárquico. El propósito del método es permitir que quienes deben tomar decisiones puedan estructurar un problema multicriterio en forma visual, mediante la construcción de un modelo que básicamente contiene tres niveles: meta u objetivo, criterios y alternativas. La elección de alternativas de manejo mediante el proceso analítico jerárquico se realiza empleando software desarrollado específicamente para este objeto. Entre los recursos libres disponibles en la Web destaca el programa HIPRE 3+ desarrollado por Mustajoki y Hämäläinen.

 

 

Retos del manejo forestal

El manejo forestal es una experiencia gratificante para quienes son responsables de su ejecución, ya que enfrenta retos en de diversas áreas. Existen numerosos retos económicos, dentro de los cuales destacan diversas necesidades como son: generar beneficios, no operar con pérdidas, operar dentro de un presupuesto y generar ingresos o retornos financieros competitivos en comparación con otras inversiones. Estos retos económicos usualmente se expresan en unidades monetarias por lo que es necesario internalizar en las valoraciones las externalidades de los servicios de los ecosistemas. No menos importantes son los retos sociales respecto al manejo forestal. Convencer a la opinión pública de que el bosque está siendo manejado responsablemente no es un asunto trivial, de ahí la relevancia de la aplicación de instrumentos de política forestal como la certificación forestal (leyes y regulaciones) que guíen el manejo de los recursos forestales. Existe también la necesidad de generar empleos para las comunidades locales y pagar estos empleos con salarios suficientes.

En muchos procesos de planeación forestal, la obtención y procesamiento de información puede tomar más de la mitad del tiempo invertido en el proceso de planeación. Contar con un sistema de información geográfica, bases de datos suficientes, proyecciones de crecimiento e incremento para cada prescripción de manejo, precios, costos, medidas de la calidad potencial del hábitat y niveles de las restricciones que serán aplicadas representa también un importante reto. Colectar, manejar, corregir y dar formato a los datos se lleva a cabo generalmente por varias personas en la organización, y es, desafortunadamente, uno de los aspectos poco valorados en el manejo. La motivación de las personas para capacitarse y apoyar el proceso de planeación es asimismo un reto, al igual que una serie contratiempos que pueden ocurrir durante el desarrollo del plan; sin embargo, muchos de los retos de la planeación que son internos a una organización de recursos naturales pueden ser superados si se reconocen y discuten entre sus miembros.

 

 

La investigación necesaria

Para la planeación, ejecución y monitoreo del manejo forestal sustentable se requiere de la generación de conocimiento científico como apoyo a la toma de decisiones y medición del logro de los objetivos establecidos. La producción maderable será el principal objetivo en muchas regiones, y para su implementación es necesario conocer la dinámica de los ecosistemas bajo manejo a fin de garantizar una cosecha sustentable. A pesar de que el manejo forestal maderable ha sido fundamental en el pasado y existen numerosas investigaciones sobre el desarrollo de las especies en diversas regiones, las investigaciones sobre volumen, crecimiento, incremento, densidad y cosecha permisible, entre otras, siguen siendo necesarias y vigentes, a la par de las referentes al conocimiento de las interacciones de los diversos elementos de los ecosistemas y de estos con la sociedad y otros ecosistemas. Actualmente se reconoce la importancia de los bosques como un medio para mitigar las emisiones de gases efecto invernadero, considerados los causantes del cambio climático, particularmente el bióxido de carbono (CO2) es el gas con mayor participación y se fija a través del proceso de fotosíntesis, en el que las plantas utilizan CO2 y liberan oxígeno. Así, para contrarrestar las emisiones de carbono, un número creciente de instituciones y organizaciones de diferentes países están desarrollando planes para preservar bosques naturales, mejorar el manejo de bosques y establecer plantaciones forestales, ya que los árboles almacenan el carbono por periodos prolongados. En este marco, la investigación necesaria refiere al desarrollo de métodos para la evaluación de la capacidad de captura de carbono en ecosistemas forestales, con objeto de valorar este servicio ambiental con procedimientos confiables que sean costo-eficientes (Husch et al., 2003; Ravindranath y Ostwald, 2007; Van Laar y Akça, 2007; Hoover, 2008; Bigsby, 2009).

El avance en el desarrollo de los diferentes tópicos de investigación mencionados, posibilitará la integración de sistemas de apoyo a la toma de, cuyo diseño deberá realizarse por equipos interdisciplinarios y que puedan ser aplicados en un amplio rango de condiciones ecológicas, sociales y económicas; tengan costos accesibles; sean de fácil comprensión y operación, que expliquen los impactos de las alternativas de manejo.

Análisis

Los bosques naturales se manejaron en el pasado principalmente para la producción de madera y energía (leña y carbón). El aprovechamiento se realizó en algunos casos en forma excesiva, lo que ocasionó consecuentemente fuertes presiones hacia su protección, provocando la pérdida de importantes superficies de bosques, selvas y matorrales. Las prácticas de aprovechamiento se desarrollaron principalmente como respuesta a la demanda del mercado nacional e internacional, básicamente de maderas, ignorando en muchos casos otros aspectos muy importantes de los ecosistemas forestales como los ambientales y ecológicos, los bienes y servicios que brindan (principalmente la captura de carbono y los servicios hidrológicos), así como las implicaciones sociales, económicas, ambientales e institucionales de los ecosistemas forestales y su manejo. El manejo forestal es esencialmente un proceso administrativo. Como tal, comprende entre otras las fases de organización, planeación, ejecución y control, teniendo como resultado el desarrollo futuro de los ecosistemas forestales. En este marco hay tres cuestiones importantes a considerar: ¿cuáles son los objetivos que las actividades de manejo esperan alcanzar?; ¿cuáles son los procedimientos operativos y recursos financieros requeridos para ejecutar un plan de acción programado para lograr los objetivos? y ¿cuáles son los criterios que pueden ser empleados para evaluar la medida en la cual los objetivos son alcanzados? Los manejadores forestales deben establecer objetivos adecuados, tomar los pasos necesarios para alcanzar estos objetivos y medir el nivel de éxito en el cumplimiento de los mismos, esto es, realizar la planeación, la ejecución y el monitoreo del manejo del bosque. La visión sobre cómo y para qué se debe manejar el bosque ha adquirido una nueva dimensión en el presente siglo. La planeación a largo plazo continuará sin duda teniendo su lugar en el manejo forestal, considerando que en esta nueva era las metas cambiantes caracterizarán las prácticas forestales, lo que dará vigencia al manejo adaptativo. El manejador forestal deberá ser perceptivo al ambiente institucional que rodea al bosque y a los valores culturales para reajustar los objetivos predeterminados en su plan de manejo a lo largo de un camino; el reto es lidiar con metas e hitos cambiantes en el manejo de bosques.

Conclusión

 

En el siglo XXI, el manejo forestal deberá seguir avanzando hacia la sustentabilidad, teniendo en mente que esta meta es alcanzable a diferentes escalas, por diferentes actores y mediante diferentes estrategias, herramientas y prácticas; no existe un modelo único.

A pesar de los avances en la fase de planeación del manejo forestal sustentable, es necesario mejorar la ejecución del mismo. Para ello se requerirá de recursos humanos operativos con capacidades certificadas, amplia visión del manejo y voluntad de interacción en grupos interdisciplinarios. Los responsables del manejo deberán mejorar sus capacidades no solamente en aspectos técnicos, sino para el fortalecimiento del capital social que posibilite una adecuada organización y gestión empresarial.

El manejo forestal sustentable constituye una práctica de gestión de los recursos forestales que asegura los procesos y funciones del bosque, posibilita la conservación de la biodiversidad y satisface necesidades sociales. Para esto es importante que se pongan en práctica cada una de las técnicas o aplicaciones que nos permita conservar y darle buen uso a los recursos forestales.

 

 

 

 

 


Referencia Bibliográfica

 

ü  Calderon, O. A. (2015). Manejo forestales en el siglo xxi. Nuevo León. México.


1 comentario:

  1. Hay que leer bien esto, para cuidar los suelos y enseñar a otras personas a como hacerlo, muy bueno.

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